Vamos juntos al Cielo

Juntos al Cielo Ahora que Dios tiene un propósito en nuestra vida, que es sin duda alguna, que alcancemos la felicidad eterna. Una vez me dijeron que si un escultor que hace su mejor obra, no la crea para destruirla. Con cada golpe en la piedra, busca la perfección. Y después de haber hecho lo mejor posible quiere que su obra permanezca por siempre. Cuanto más Dios que nos ama como hijos y somos su creación magnífica, somos su obra máxima, ¿qué quiere para nosotros? Es una pregunta que en la lógica humana es de fácil respuesta. Por eso, el Espíritu Santo, fuente de vida y consolador nos habla al oído cada día. Y nos habla de diferentes modos: por medio de una canción, de un hermano o hermana que te dirige la palabra, al encontrarte con una persona, al tener contacto visual con los niños o por las palabras que emiten, por un momento de oración, por incidentes, por sueños, por gestos. Lo importante es que muestres que anhelas esta comunicación, tal vez orando con frecuencia o estar...